Fuga de verano
El verano es siempre un instante fugaz.
Se escapa entre días largos, soles intensos,
encuentros que tal vez duren solo una temporada,
pero que quedan grabados como eternos recuerdos.
En la niñez, los veranos son frontera y refugio:
donde descubrimos amistades, juegos y silencios,
donde el tiempo parece detenerse
y, sin embargo, pasa volando.
Fuga de verano habla de esa paradoja:
lo efímero que se vuelve inolvidable,
lo breve que deja raíces hondas,
como esas memorias luminosas de la infancia
que nos acompañan toda la vida.
Tintes naturales sobre lienzo y herradura de caballo.
Medidas: 100 x 70 cm
$550.000